[SC. catvari maharajakayika, caturmahäraja, PAL. catummahäraja, TIB. rgyal-po chen-po bahi, CH. hushizhe, JAP. shi-tennö, MG. maharaja]
Las cuatro deidades que residen en el cuarto nivel de la base del monte Sumeru y guardan los puntos cardinales. También se las llama «guardianes del universo» (SC. lokapala, TIB. 'jig-rien skyong-ba). Cada una de ellas gobierna un pueblo de seres semidivinos. Se las encuentra representadas en forma de frescos en los templos de Asia central y del Tibet, a cada lado de las puertas.
En la tradición tibetana, durante los retiros a puerta cerrada, se colocan postes en los cuatro puntos cardinales para simbolizar los límites externos que no hay que franquear. Sobre cada uno de ellos, se coloca la imagen de los lokapala en un tragaluz, con una ofrenda de torma. Su presencia simboliza la protección del entorno de retiro contra todo obstáculo mundano externo.
Las estatuas de los cuatro grandes reyes se levantan igualmente, amenazantes, a las puertas de los templos chinos y japoneses, o en los ángulos de los mandala. Se representan de pie, con aspecto guerrero, enojado. Adornados de una armadura con protección para los brazos y con grebas, con o sin casco, se encuentran rodeados de llamas y cada uno tiene un atributo específico:
1. Drtirastra (TIB. Yul-'khor bsrung, CH. Chiguo, JAP. Jitoku-ten o Daizurata-ten, MG. Orchilong Tetküchi) preside en el este. En la iconografía tibetana, es de color blanco, toca el laúd y gobierna a los gandharva, los músicos celestes «comedores de olores» (TIB. dri-za). En China, es de color verde azulado y toca el pipa. En el Japón, a menudo blande una espada y aplasta a un demonio.
2. Virüdhaka (TIB. 'Phags-skyes-po, CH. Zengzhang, JAP. Jöchö-tennö, MG. Ulumchi Tereltü) gobierna el sur y el pueblo de los Kumbhanda.
En el Tíbet, es verde o azul, y lleva espada y casco en forma de cabeza de makara. En China es de color rojo o blanco, verde en el Japón, y sostiene una lanza o una espada.
3. Virupaksa (TIB. Mig mi-bzang, CH. Guangmu, JAP. Kömoku-tenno o Birubakusha-ten, MG. Sain Bussu Nidudü) es el guardián del oeste que reina sobre los naga. En la India y en el Tíbet, es de color rojo, sostiene una serpiente en la mano derecha y un stupa en la izquierda. En China, es de color blanco, sostiene una cuerda y un rollo de sutra o bien una lanza.
4. Vaisravana (TIB. rNam-thos-sras, CH. Duowen, JAP. Bishamon-ten, MG. Bisman Tengri) es el guardián del norte y el rey de los yaksa. Jefe de los cuatro grandes reyes y protector de las riquezas, su culto se ha desarrollado por todas partes en el Mahayana y en el Vajrayana. En el Tíbet, es de color amarillo, ostenta un pendón de victoria en el hueco de su brazo derecho y sostiene una mangosta que escupe joyas en la mano izquierda.
Aparece bajo otras apariencias, como la de Kuvera (TIB. Kubera). En China, es negro y se le apoda «el guerrero negro». Sostiene una joya y una serpiente. En el Japón, se le llama Tamonten cuando forma parte de la tétrada de los cuatro reyes guardianes, y Bishamon-ten cuando es objeto de un culto específico. Considerado primero como una deidad de curación que habría salvado al emperador Daigo (898-930), se convirtió en deidad de las riquezas en la época Heian, y posteriormente en protector de los samurais en época Kamakura. Es también uno de los siete dioses populares de la felicidad (JAP. shichifukujin) desde el siglo XVII. Se le representa con rostro azul, aplastando a dos hechiceras (Niramba y Vilamba), sosteniendo una lanza o un bastón y un stüpa. Es el protector del Estado tanto en China como en el Japón.
Comments